El pasado 7 de febrero un pastor alemán de grandes dimensiones atacó a un corredor en la pista finlandesa. El perro, que bien estaba suelto o se soltó, sin bozal, se abalanzó sobre un corredor que en ese momento pasaba a su lado y tras varios intentos de morder, de los que pudo zafarse el corredor, finalmente hincó su dientes en el muslo izquierdo, cerca de la cadera, rompiendo la maya deportiva y produciendo varias heridas. El corredor hubo de ser atendido en el centro de Salud de la Lila por lo que se dio parte a la policía y a la consejería correspondiente, ratificando esta notificación el propio deportista en la comisaría de policía.
El asunto ha sido resuelto en el juzgado de instrucción número 1 de los de Oviedo, donde la letrada del Bufete Casa de Ley, Ana Vallina Fernández-Posada ha defendido los intereses del hombre atacado. La sentencia tras recordar que se ha despenalizado este tipo de situaciones si ha resuelto la responsabilidad civil por las lesiones, daños y secuelas producidas por el perro. El acompañante del perro, no dueño del mismo, quedó absuelto por la despenalización, pero la dueña y su compañía de seguros han sido condenados a abonar algo más de 2.000,00 € , por los días de curación, la ropa rota y las cicatrices que le han quedado al deportista. La letrada Ana Vallina recuerda la necesidad de denunciar este tipo de actos para concienciar a los dueños de los perros de la necesidad de asegurar a los mismos, de llevarlos atados donde haya mucha afluencia de personas y, en los casos de perros grandes y/o peligrosos utilizar bozal, que en el caso comentado hubiera dejado en un susto este asunto.
Sentencia del Juzgado de Instrucción N1: 000742/2015
